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domingo, 22 de enero de 2012

¿Rendirse o alcanzar el éxito?

"Rendirse sin agotar todas nuestras potencialidades y sin dar nuestro mejor esfuerzo, es negarse alcanzar el éxito"
                                                                 


La gestión para el logro de un alto desempeño en prevención de accidentes y de enfermedades en el trabajo exige un alto nivel de convencimiento y compromiso en principio de quien coordina o está a cargo de la seguridad y salud e igualmente del resto de los integrantes de la organización o empresa. En el difícil camino de la excelencia en prevención debemos estar conscientes de los distintos obstáculos y sinsabores a los cuales nos enfrentamos y seguiremos encontrando cuando tratamos de lograr cambios para mejorar los niveles de cultura en la organización, pero los obstáculos debemos convertirlos en oportunidades de mejora y salir fortalecidos en el proceso para seguir avanzando, el pensamiento que cito al comienzo lo tengo presente cada vez que alguna situación adversa se presenta y me anima a pensar si realmente he agotado todo mi potencial, estrategias y conocimientos para superarla o me estoy dando por vencido sin antes luchar.
Lo curioso ha sido que cuando lo analizo me he dado cuenta que aún me quedan unas cartas que jugar y recuerdo que el éxito puede estar en esta siguiente jugada o en la próxima.
Queridos lectores y colegas los invito ha mantener la constancia y la perseverancia en sus objetivos y metas, a involucrar y empapar de entusiasmo a los demás para sumarlos como aleados hacia la gestión de prevención y a mantener presente este pensamiento si lo consideran de utilidad.

"Rendirse sin agotar todas nuestras potencialidades y sin dar nuestro mejor esfuerzo,
es negarse alcanzar el éxito"

                                                                                                          Luis G. Farreras O



Estimados lectores siéntanse libres de agregar sus comentarios en esta publicación o en cualquiera de las anteriores, con gusto los leeré.
Saludos a todos los visitantes y lectores.

                 

miércoles, 11 de enero de 2012

Pedro y su amigo Valor. Primero Seguridad

En esta oportunidad con mucho agrado comparto un cuento que escribí hace un tiempo atrás, el cual utilizo al dictar el taller denominado "Factor Humano como clave del éxito en prevención de incidentes". Espero sea de utilidad para ustedes como hasta ahora lo es para mí en la promoción de la prevención de accidentes.

El mismo trata de dos amigos uno llamado Pedro y otro llamado “Valor”. Pedro era un trabajador muy responsable y respetuoso, Valor era uno de sus más grandes amigos sincero y honesto con el cual compartía dentro y fuera del trabajo.
 

Parte I – La urgencia y un mal consejero


       Un día Pedro estaba laborando como de costumbre en la empresa llamada “URGENCIA” en la cual había laborado durante 10 años, durante el turno de trabajo su supervisor le asigna una actividad que era requerida con extrema rapidez, Pedro tenía todas las ganas de realizar el trabajo de forma rápida y eficaz pero también de forma segura, siempre estaba presente su salud, la familia y el futuro de la misma.  Pero en esta ocasión se sentía presionado por la extrema urgencia requerida para el trabajo. En ese momento pensó que para ahorrase tiempo podía hacerlo sin cumplir los procedimientos de seguridad. “Esta sería mi primera falta de seguridad”, ¿qué tan malo podría ser?  con un poco de suerte todo me saldría bien y ganaría puntos ante mis superiores “Pensó Pedro”
     En el camino al taller para buscar las herramientas de trabajo Pedro se cruzo con otro trabajador llamado Juan al cual le comento lo urgente del trabajo  a realizar y lo que había pensado, Juan sin pensarlo dos veces lo apoyo en la acción de pasar por alto los procedimientos de seguridad y le dijo “no hay que estar cuidándose tanto al que le toca le toca haga lo que haga, es solo cuestión de  suerte”.

Parte II – Aparece un gran amigo
    El trabajo asignado era el desmontaje, limpieza y montaje de un equipo en una línea de producción para la fabricación de un producto X requerido por un cliente. Pedro, en el apremio decidio realizar el trabajo sin desactivar y bloquear las fuentes de energía: eléctrica, hidráulica y mecánica de los equipos y tampoco coloca avisos y tarjetas de seguridad como lo indicaba el procedimiento para estos casos.

    Cuando Pedro se disponía a realizar el trabajo llego al lugar su Gran Amigo “Valor”, el cual se percato de la falta de medidas de seguridad evidenciando el incumplimiento del procedimiento seguro de trabajo establecido.
    “Valor” el Gran Amigo de Pedro lo saludo, hablo y reflexiono con él sobre los peligros al cual se exponía de trabajar en esas condiciones inseguras. Pedro por su parte le explico lo importante y urgente del trabajo con lo cual pretendió justificar sus acciones.
 
Parte III – Consejo de un amigo
    Su Gran Amigo Valor lo escucho atentamente, comprendio y luego le dijo “Pedro lo importante y urgente no justifica el tener un accidente, más vale que inviertas unos minutos para asegurar el trabajo y no estropear tu vida y la de tu familia en un segundo, piénsalo Pedro. Yo, tu amigo Valor siempre estaré contigo pero la decisión final es tuya.
     Pedro al escuchar a su Gran Amigo “Valor” reflexionio y tomo la sabia decisión de trabajar alineado con los procedimientos de seguridad y con su amigo “Valor” al cual le agradeció el oportuno llamado de atención.
    Finalizado el trabajo Pedro se reúne con el supervisor y le informo de la culminación satisfactoria del mismo y este lo felicito por su labor.
Parte IV - Regreso a casa.
    Al finalizar el turno Pedro como de costumbre se embarco en su vehículo y transcurrido un tiempo llego a casa, al entrar saludo a su esposa María,  a su hijo Carlos y a su hija Ana y después de abrazarlos les dijo: Familia estoy alegre de haber llegado y verlos de nuevo.

    Carlos el mayor de sus hijos extrañado por la actitud de su padre  le dijo: Papá que hay de diferente hoy, todos los días regresas del trabajo y saludas pero hoy te noto más alegre.
    Pedro contesto a su hijo: es cierto siempre he regresado, pero hoy pude no haberlo logrado de no ser por mi Gran Amigo “Valor”.



    El hijo curioso por el nombre del amigo, pregunta ¿Papá quién es él?. Pedro le explica: Valor es un Gran Amigo que siempre me acompaña y con el cual comparto ideas y me aconseja en los momentos que me desvió de lo correcto para hacerme entender lo productivo y beneficioso que es trabajar con seguridad. Luego Pedro relato lo sucedido a su esposa e hijos.

    Fin del cuento.


Pregunta: ¿Quién es el amigo valor?